El suizo Joel Eggimann y dos amigos ascendieron 680 metros de altura de la estructura completa del ascensor Hammetschwand situado en la montaña Bürgenstock, Suiza.
Tal y como se ven en las vertiginosas imágenes, Eggimann y sus amigos ascendieron sin ningún tipo de protección y, además, realizaron todo tido de arriesgadas maniobras , como sentarse con los pies colgando o suspenderse a esa altura, recordemos; casi 700 metros, colgándose tan sólo de una mano. El más mínimo error y les costaría la vida.
¿Podrías disfrutar de esos bellos paisajes suizos con vistas al lago Lucerna y de esa puesta de sol estando en la situación de estos chicos? El vídeo resulta absolutamente impactante.