Los carteros durante mucho tiempo han sido admirados por el compromiso en la entrega de cartas, sin importar el clima. De hecho, hay una inscripción en la oficina de correos Farley James de Nueva York que dice: «Ni la nieve ni la lluvia ni el calor ni la oscuridad de la noche impedirán a estos mensajeros la rápida conclusión de sus rondas designadas«. Si bien no es un lema oficial, el Servicio Postal de los Estados Unidos ha destacado por esa promesa durante siglos. Para un empleado veterano como Glenn Corbett, es una frase que conoce bien.
Glenn Corbett, de Pensacola, Florida, ha sido cartero durante 35 años. En todo ese tiempo ha visto una gran cantidad de extrañas y maravillosas cosas en su ruta y ha entregado el correo con todo tipo de clima. Un día típico para Glenn es ocupado con el ajetreo de la conducción de un camión y la entrega del correo, pero el 4 de febrero de 2016, vio algo que le hizo dejar de trabajar y se puso de pie a un lado de la carretera. Sí, estaba lloviendo, pero Glenn estaba acostumbrado a eso, ¿y su promesa postal?
La razón es que Glenn había visto una caravana funeral de un veterano de la Segunda Guerra Mundial bajando por la carretera. Tal vez estaba pensando en el hecho de que sin la valentía y el sacrificio de aquellos veteranos estadounidenses no habría ni correo, o tal vez simplemente estaba tratando de mostrar respeto a una familia que había perdido a un ser querido.
De cualquier manera, se quitó el sombrero, cruzó las manos, y se puso solemnemente a un lado de la carretera hasta que la caravana había pasado, la lluvia corría por su rostro y empapaba su uniforme.
Es asombroso qué tipo de efecto puede tener una sola imagen como ésta. Cuando la miro, sólo puedo esperar a hacer lo mismo si estuviera en la situación de Glenn. Con las comodidades de la vida actual a nuestro alrededor, puede ser demasiado fácil olvidar que las libertades de las que disfrutamos fueron pagadas con vidas de veteranos. Es un recordatorio aleccionador de lo mucho que damos por sentado.
Carole Chase-Draughan, hija del veterano que había fallecido, también quedó impresionada por el respeto que Glenn mostró a su padre, y por la imagen de arriba. La imagen se ha compartido más de 31.000 veces desde que se ha subido a Facebook. Esperamos que tú también la compartas con tus amigos y familiares. No puedes estar de pie bajo la lluvia, pero al igual que Glenn, todos podemos dedicar un momento a honrar a nuestros veteranos.
