Patsy Gibbons de Kilkenny, Irlanda, podría parecer un lugareño más de la zona, pero no podía estar más lejos de la verdad. Esto se debe a que Patsy es el «padre» de tres adorables «bebés» que salvó y eventualmente adoptó como propios.
Pero la familia de Patsy no es como piensas …
Patsy es el orgulloso «padre» de tres zorros: Gráinne, Minnie, y Henry.
Cada zorro tiene tras de sí una historia dura, pero los tres, inevitablemente han encontrado una casa con su padre, Patsy, que les dio un lugar seguro para vivir y tanto amor como se pueda desear.
Henry, el más joven de la familia y tiene once meses, fue atacado por un perro cuando era una pequeña cría. Patsy le ayudó a tener casi una recuperación completa, aunque uno de sus ojos está dañado de forma permanente.
Cuando Gráinne era un bebé, fue encontrada después de haber estado atrapada en una caja durante diez días. Patsy fue rehabilitada, y, finalmente, la adoptó como propia.
Minnie tiene cinco años y fue llevada a Patsy cuando una mujer de la zona la encontró abandonada cuando era una cría. Ella es sin lugar a dudas la reina del drama del grupo, siempre está causando problemas a Patsy y a los otros zorros. ¡Por la expresión de su rostro cuando se sienta en el regazo de su padre, parece como si estuviera tramando algo!
Los zorros tienen su propio y acogedor refugio en el que duermen. Están incluso domesticados, y entran en la casa cada noche para pasar el rato con papá.
En conjunto, el cuarteto forma una familia bastante inusual… ¡y adorable!. Han capturado la atención de la comunidad. Hay coches que a menudo se detienen, para tomar fotos de ellos. Como cuando Patsy camina por la ciudad con los zorros con una correa.
Él dice que preferiría que en lugar de parar y charlar, simplemente tomasen una foto y se alejaran.
Los zorros y su padre incluso hacen viajes a la escuela local para educar a los niños sobre la vida salvaje.
«A los niños les encanta verlos«, dijo Patsy a Irish Times. Después de todo, ¿a quién no le encantan estos pequeños?
Estos adorables zorros tiene la suerte de tener un padre muy cuidadoso y compasivo. Juntos forman la familia más adorable que hemos visto nunca.