En todo el planeta, el aumento de las temperaturas está haciendo que los glaciares desaparezcan a un ritmo alarmante. A medida que se funden, cambian el aspecto por completo de un terreno, y a veces eso significa revelar secretos largamente escondidos que estaban enterrados bajo el hielo.
Trentino, Italia, es uno de esos lugares que está cambiando todos los días. Ubicado entre los Alpes, esta provincia cuenta con un paisaje impresionante, pero al igual que muchos lugares de Europa, también tiene un pasado trágico.
Durante la Primera Guerra Mundial, los soldados italianos de élite fueron entrenados para combatir a sus enemigos de Austria y Alemania en condiciones de congelación. Durante tres años, tendrían que acampar en estas montañas a alturas de hasta 2.000 metros en lo que se conoció como la Guerra Blanca.
Desde 2004, los glaciares se han estado derritiendo lentamente, y mientras lo hacen, revelan los cuerpos de soldados que han estado ocultos en el hielo durante 100 años.
El primer hallazgo se produjo hace más de una década, cuando unos arqueólogos detectaron los esqueletos de tres soldados austriacos enterrados en la nieve.
Más de 150.000 hombres murieron en este campo de batalla, la cima de la montaña, durante la guerra, muchos de ellos sucumbieron por avalanchas, congelación, y enfermedades. Desde 2004, se han encontrado más de 80 esqueletos.
Los propios hombres no era lo único que esperaba bajo el hielo: arqueólogos también descubrieron complejos túneles que los soldados habían construido en la ladera de la montaña.
Con el tiempo, los investigadores también han recuperado muchos objetos pequeños que los soldados dejaron atrás, como fotos, cartas, juegos de naipes, e incluso alimentos que se han onservado con el frío.
Ahora, el reto es cuidar estos artefactos y mantenerlos a salvo de los ladrones que quieren venderlos para su propio beneficio económico.
Los arqueólogos no saben cuántos hombres más pueden estar bajo el hielo, pero están decididos a que todos y cada uno de ellos tengan un funeral militar respetuoso después de que sean encontrados.
Es increíble pensar lo mucho que la historia ha estado esperando para que fueran encontrados en la montaña.