A Silvia y a su hija les encanta hacer manualidades juntas, pero su casa en Utah no tenía un espacio en el que pudieran estar juntas y ser creativas – pero eso está a punto de cambiar. En 2014, madre e hija se fueron a visitar a la familia durante unas semanas, dejando a papá en casa. Mientras estaban fuera, Andrew decidió darles la mayor de las sorpresas a su esposa e hija mientras documentaba todo el proceso de principio a fin. El resultado es el regalo más dulce y más maravilloso que un hombre puede dar a las dos chicas más importantes de su vida.
En 20 días, Andrew transformó el sótano de la casa familiar en la nueva e impresionante sala que habían estado soñando. «Fue mucho trabajo, pero al estar ellas fuera pude trabajar todas las horas de la noche«, escribió Andrew en YouTube. La sala construida cuenta con mesas hechas a mano, luces de techo, paredes luminosas y coloridas, y un gran vestidor para almacenamiento. El siguiente video es un time-lapse que revela la cantidad de tiempo y esfuerzo que Andrew puso en esta sala tan especial.
Ahora toda la familia disfruta del nuevo espacio. Mamá, papá e hija incluso han comenzado a vender en Etsy sus golosinas hechas a mano creadas en esta sala.
