La comercialización de los Cheetos Flamin’ Hot ha sido increíblemente precisa. Este aperitivo de queso es «peligrosamente bueno». Tan peligroso, de hecho, que muchos médicos están aconsejando a los padres que no permitan que sus hijos los coman.
De hecho, la sobreexposición a este snack puede hacer que acabes en el hospital a causa de sus efectos secundarios.
La doctora Kathleen Berchelmann del hospital St. Louis Children (EE.UU.) explica que los Cheetos Flamin’ Hot se hacen con las cantidades precisas de sal, grasas saturadas y azúcar, que hacen que el alimento sea increíblemente adictivo. Las personas que tienen un buen autocontrol logran mantener estos aperitivos lejos. Pero los niños, que tienen un menor autocontrol o incluso ninguno, tienden a terminar toda la bolsa y querer más.
Esto no es saludable simplemente porque es malo comer alimentos o grasas muy procesados.
El consumo de estos Cheetos Flamin’ Hot en particular, es malo para la salud, ya que todas las especias picantes que se ingieren puede acabar dañando el estómago de forma seria.
Las especias picantes de estos Cheetos pueden pegarse a lo largo del tracto gastrointestinal – incluyendo el esófago, estómago, duodeno e intestino delgado. Lo cual puede causar un dolor en el abdomen superior que sube hasta el pecho, «probablemente debido a las guindillas y especias picantes contenidas en este snack«, explicó el Dr. Glatter. El Dr. Glatter es médico de medicina de emergencia en Nueva York.
En pacientes que han tenido una historia de acidez o reflujo ácido, estas especias pueden crear una respuesta aún más fuerte y negativa.
Para otros pacientes – incluyendo niños – comer una gran cantidad de Cheetos Flamin’ Hot puede causar que las heces adquieran un color rojo. Los padres alertados por sus hijos tienden a pensar lógicamente en que hay sangre en las heces, lo que a su vez los lleva a visitar la sala de emergencias por pánico.
Aunque las heces de color rojo no necesariamente debería ir asociada a una respuesta de pánico, en este caso, el cambio de color sugeriría que simplemente se han comido demasiados Cheetos Flamin’ Hot. Se necesita sólo una pequeña cantidad de colorante alimenticio para cambiar realmente el color de las heces.
La próxima vez, cuando te encuentres tentado de comer una bolsa entera de Cheetos Flamin’ Hot, trata de evitarlo. Tu cuerpo te lo agradecerá.