El abuso infantil es por lo general un secreto muy bien guardado, pero para estos padres de Maryland, Mike y Heather Martin, fue algo que compartieron con millones de personas a través de su canal de YouTube llamado “DaddyOFive”.
Las bromas han sido una tendencia viral desde hace muchos años, creando un mercado competitivo que cada vez lleva más lejos los límites de la decencia para atraer al mayor número posible de espectadores.
Pero para Mike y Heather, en lugar de que extraños protagonizen al azar sus videos, se enfocaron en sus propios hijos – llevándoles a las lágrimas, arrebatos de ira, o hasta la absoluta humillación, todo en nombre de la satisfacción de sus 750.000 suscriptores.
Ahora, después de años de abusos y la condena de muchos espectadores, los Martin han perdido la custodia de sus dos hijos.
“Es muy doloroso y perturbador ver como abusan de mis hijos”, dijo Rose Hall, la madre biológica de los niños que había perdido la custodia en favor de Mike hace algún tiempo, pero ahora tiene la custodia de emergencia después de que la controversia de YouTube alcanzara su punto máximo.
“Los niños están en una especie de modo para ser desprogramados en este momento”, agregó Hall, “Lo están haciendo bien. Están volviendo a ser de nuevo juguetones“.
El hijo menor de Mike, Cody, era por lo general el objetivo principal de los abusos, que van desde el sangrado de la nariz (Mike afirma que era sangre falsa), hasta la destrucción de su X-Box, la amenaza con ponerlo en adopción o ser falsamente acusado de mal comportamiento.
En un video, Cody suplica que lo maten debido a la agonía que parece sufrir ante la cámara, diciendo: “No me gusta mi vida, tan sólo mátame.”
En uno de los videos en los que actúan aparece la última gota que inicio la pérdida de su custodia, le gastan una broma a Cody al que le acusan de derramar tinta sobre la alfombra, después de lo cual sus padres le gritan brutalmente y le reprenden por ello.
El video, que desde entonces ha sido eliminado del canal DaddyOFive, todavía se puede ver aquí:
Incluso se inició una petición por Internet, instando a los Servicios de Protección que investigaran a la pareja, obteniendo más de 19.000 firmas.
Incluso el popular YouTuber Philip DeFranco, finalmente, se sintió obligado a intervenir, diciendo: “¡Provocan e instigan a este chico y luego le gritan por enfadarse! ¡Lo acusan de estar enfadado, pero ellos son los que le instigan por dinero!”
En virtud de la urgencia de Rose Hall, la madre biológica de los niños, las autoridades comprobaron el caso, llegando a la conclusión de que los padres realizaban “castigos corporales [apropiados].”
Finalmente, y después de innumerables vídeos documentando sus muchos abusos, Mike y Heather Martin han perdido la custodia de dos de sus hijos, incluyendo a Cody y emitieron una disculpa en un vídeo en su canal:
«Esta ha sido la peor semana de nuestra vida«, dice Heather en la disculpa, “Nos damos cuenta de que hemos tomado algunas decisiones terribles como padres”.
Mike añade: “Entiendo, reconozco y respeto cómo cada uno se puede sentir. Pusimos cosas en Internet que no deberían estar ahí e hicimos cosas que no debimos hacer “.
En un intento de justificar su canal de YouTube, Heather eludió los cientos de miles de dólares que según los informes ganaron con su canal: “Podíamos darles muchas más cosas de las que antes podíamos. Sentíamos que estábamos haciendo lo mejor que podíamos para ellos “.
En Twitter, Mike escribió, “Lo siento, pero hemos desmonetizado todos los vídeos, la seguridad de mi familia es más importante que los vídeos falsos.”
