Eli Thompson nació sin nariz debido a una rara malformación que afecta a 1 de cada 197 millones de nacimientos.
El pequeño nació a principios de marzo de 2015 en Alabama, Estados Unidos, y tuvo que someterse a una traqueotomía con tan sólo 5 días. Hay sólo 43 casos registrados de arhinia congénita desde el primer caso detectado en 1931.
Potencialmente puede ser peligrosa para la vida al causar problemas respiratorios y de alimentación, pero hay casos conocidos de bebés que llegaron a convertirse en adultos.
En los últimos días ha habido buenas noticias para Eli, y es que tanto su examen de vista como la exploración craneal han resultado positivos.
Eli podrá tener una nariz hecha especialmente para él, pero los médicos no están seguros si será funcional. La madre de Eli, Brandi McGlathery, ha dicho que no tienen prisa por que tenga esa nariz. «Hasta el día en que quiera tener una nariz, no queremos hacer nada«, dijo a un periodista. «Tenemos que tomar las cosas como vienen, día a día. Él es perfecto tal como es«.
La madre de Eli ha mantenido a la gente informada a través de una página de Facebook en la que publica actualizaciones sobre el estado de Eli. Sus mensajes han incluido el primer baño de Eli, la alimentación con biberón y la primera vez que vio su carita sin un respirador oral.
«¿Cómo se podía saber que alguien tan pequeño podría cambiar la vida de tantas personas en tan poco tiempo? Nuestro bebé-milagro es perfecto«, dijo en un post.
Debido a los enormes costes médicos a los que Eli se enfrentará, la familia ha creado una página en GoFundMe que ya ha recaudado más de 5000 euros.
Eli tiene que ir a su casa próximamente y aunque él no lo sabe todavía, ya es una sensación en Internet.