Dos elefantas que pasaron sus vidas encadenadas en un circo han llegado finalmente a su nuevo hogar: un santuario donde podrán vagar libremente por primera vez en su vida.
Una caravana llevó a Mia y Sita en un viaje de casi 2.000 kilómetros, día y noche, y a través de fuertes lluvias, para llevarlas al Elephant Conservation and Care Center a cargo de la Wildlife SOS en Mathura, India.
Hace tan sólo unos días llegaron al lugar donde pueden ser verdaderamente libres de las cadenas.
Ambas elefantas sufren de problemas de salud derivados de estar encadenadas durante todo el día. También han sufrido de largos tramos de tiempo en el que ni siquiera podían dormir acostadas – a veces pasaban todo un año pasó sin un descanso completo.
Pero ahora Sita ha entrado en una piscina de agua fría por primera vez…
Mientras tanto, Mia finalmente ha podido descansar tumbada…
«Mia y Sita parecen ya mucho más felices«, dijo Kartick Satyanarayan, co-fundador de Wildlife SOS, en un comunicado de prensa. «Es casi como si tuvieran la sensación de que van a tener una vida más feliz en la que no se verán obligadas a actuar en el circo nunca más – una vida donde sus articulaciones doloridas obtendrán el descanso y el cuidado que merecen.»