Si vive en San Francisco, California, puede tener la suerte de ver en directo el increíble arte de Andrés Amador. Andrés no pinta ni esculpe. Prefiere un medio que es temporal, pero absolutamente precioso: una playa de arena durante la marea baja. Andrés usa un rastrillo para crear obras de arte que pueden tener un tamaño de más de 9.000 m2. Se pasa horas creando estas intrincadas obras maestras, a sabiendas de que la marea vendrá en cualquier momento y se llevará su trabajo para siempre.
Para Andrés, su arte es «más sobre el proceso y menos sobre el resultado.»
Él sabe que todo va a ser temporal.
Mientras hace sus murales de playa, utiliza una cuerda de guía para poder hacer los patrones geométricos.
Cuando se le pregunta por qué lo hace, Andrés da la mejor respuesta…
«¡La pregunta no tiene respuesta! Es divertido. Sólo estoy en la playa.«
Considérese afortunado si se tropieza con una de sus «pinturas» de playa, porque no estará allí mucho tiempo.
Rastrillando la arena mojada en la marea baja, es capaz de hacer contrastantes colores con la arena.
Incluso ofrece sus servicios, ayudando a gente que quiere hacer lo mismo.
Incluso enseña a otros a crear estos «Paisajes de playa» como parte de un ejercicio de formación de equipos.
Según Andrés, sólo lleva un par de horas, una vez que la marea está lo suficientemente baja, crear los diseños.
Las creaciones de Andrés son sencillamente impresionantes y saber que estas delicadas creaciones son temporales de alguna manera las hace aún más hermosas.
Puede seguir a Andrés en Facebook o visitando su sitio Web donde puede comprar copias de sus diseños. Pero por encima de todo, le animamos a compartir su trabajo haciendo clic en el botón de compartir. ¡Es verdaderamente impresionante su trabajo!