Hope For Paws recibió una llamada sobre una caniche que estaba seriamente enmarañada y que vivía en las calles de Los Ángeles. La perrita, ahora conocida como Dolly, estaba absolutamente petrificada por el contacto humano, acurrucándose con mucho miedo detrás de una caseta eléctrica bajo el sol caliente. Cada vez que Eldad (de Hope for paws) se acerca, ladraba y gruñía. Sus salvadores se sorprendieron que bajo capas de grueso pelo sucio, ni siquiera podían decir si era macho o hembra. «Nadie va a hacerte daño de nuevo«, le aseguraban para tranquilizarla.
Al segundo de entrar Dolly en su coche sabe que está de camino a una nueva vida. Después de recibir su primer arreglo personal, el color de su pelaje cambia de un marrón sucio a un impresionante y precioso color rubio.
En el vídeo que puedes ver a continuación, puedes ver a Dolly feliz y saludable en su nuevo y amoroso hogar para siempre. Ella sonríe, juega, y acepta el amor con todo su corazón. ¡Qué hermosa transformación ha sido posible gracias a Hope For Paws y la Fundación Forgotten Dog Foundation!