¿Qué haces cuando tienes algo de energía extra que necesitas gastar? Tal vez te gusta «machacarte» en el gimnasio y levantar toneladas de peso. O tal vez eres como yo y simplemente bailas alrededor de tu sala de estar con todas tus canciones favoritas. A pesar de que corres el riesgo de que fijen en ti algunas miradas extrañas cuando tu familia llega a casa y te descubren con esos extraños movimientos…
Para este pequeño cochinillo súper emocionado, todo lo que necesita es un poco de tierra fresca y algo de espacio para correr. El nombre del pequeño es Oliver y definitivamente tiene mucha energía para gastar. El pequeño tipo no deja de correr a gran velocidad por todo el patio trasero tan rápido como sus pequeñas patas lo pueden llevar. Después descansa un poco frotando su hocico y la cara en la tierra, pero nunca se toma mucho tiempo hasta que de nuevo vuelve a correr alrededor de los arbustos una y otra vez. ¡Casi marea sólo de verle dar sus vueltas felices!
Después de tanta acción, apuesto a que el pequeño está listo para acurrucarse para una buena y larga siesta. ¡Y luego se despertará y comenzará todo de nuevo!