Puede ser que históricamente sea poco común encontrarse a mujeres en titulares en los que se habla de muertes, pero las siguientes mujeres fueron absolutamente letales. A través de los siglos, estas mujeres de pesadilla han sido las responsables de torturar, mutilar y finalmente asesinar a cualquiera que se les interpusiera en su camino. A veces, estas mujeres simplemente mataban por matar. Así de inquietante.
1. Elizabeth Báthory: Considerada por muchos como la asesina en serie más prolífica de la historia, la condesa húngara asesinó entre 80 y 600 niñas a las que engañaba en su castillo. Diversos testigos la llamaron «la Condesa Sangrienta» tras salir a la luz que se llegaba a comer la carne y/o beber la sangre de sus víctimas.
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2. Delphine LaLaurie: Pertenecía a la alta sociedad de Louisiana de mediados de la década de 1820, LaLaurie era especialmente cruel con los esclavos de su familia. Después de un incendio en su casa, los residentes descubrieron docenas de esclavos horriblemente torturados, mutilados y muertos de hambre escondidos en el desván. La familia huyó a París y nunca se enfrentó a ninguna acusación.
3. Lavinia Fisher: primera asesina en serie condenada en Estados Unidos, Fisher envenenaba y robaba a los huéspedes del hotel Charleston de Carolina del Sur, junto a su marido. Ambos fueron ahorcados por sus crímenes en 1820.
4. Jane Toppan era una enfermera con muchas experiencia que en 1901 confesó 31 asesinatos. Llevó a cabo retorcidos experimentos con sus pacientes y confesó que llegaba a excitarse cuando sus víctimas estaban cerca de la muerte.
5. Anna Marie Hahn: Fue enviada a los Estados Unidos desde Polonia por su familia, que estaba avergonzada por haber tenido un hijo fuera del matrimonio. Hahn encontró rápidamente un marido y junto a su hijo formaron una familia. Sin embargo, tenía un problema con el juego y comenzó a envenenar y robar a los miembros mayores de su comunidad. Tras un juicio de un mes, Hahn fue condenada a morir en la silla eléctrica en 1937.
6. Amelia Dyer: «La más prolífica asesina de bebés de la Inglaterra victoriana». Dyer proporcionaba vivienda a mujeres embarazadas que tenían la intención de dejar a sus bebés en adopción… y después los dejaba morir de desnutrición. Fue condenada dos veces por negligencia y ahorcada por sus crímenes en 1896.
7. Bertha Gifford: Actuaba como cuidadora en su comunidad, Gifford llegó a envenenar a 17 personas en un lapso de 21 años. Tras un juicio en 1928, fue considerada no culpable por demencia y pasó el resto de su vida en un hospital psiquiátrico de Missouri hasta su muerte en 1951.
8. Amy Archer-Gilligan: Junto a su primer marido abrieron el Hogar Archer para Ancianos y Enfermos en el año 1900. Rápidamente encontró un beneficio al asesinar a sus pacientes con veneno. Tras la muerte de su marido y un segundo marido, que probablemente también fueron envenenados, se pudo comprobar que Archer-Gilligan tuvo beneficios de las muertes de 60 pacientes a su cuidado. Las familias comenzaron a sospechar y fue condenada a cadena perpetua en 1919.
9. Belle Gunness: En el siglo XX, Gunness mató a más de 40 pretendientes y esposos con el fin de obtener el dinero por sus seguros de vida. Encontraba a la mayoría de sus víctimas a través de anuncios personales que se publicaban en un periódico local.
10. Los ángeles de Nagyrév: Un grupo de mujeres dirigido por la comadrona Júlia Fazekas en un pueblo húngaro, entre 1914 y 1929, envenenaron a cerca de 300 personas. Fazekas incluso animaba a las mujeres del grupo a deshacerse de los miembros de sus familias, ya que, como ella decía, «¿Para qué pasar el día con ellos?»
¿Quieres conocer al resto de mujeres letales?
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