No respetar a las mujeres nunca es aceptable, ¿y quién mejor para enseñar a los hombres que sus propias madres?
En 2015, un programa de televisión de Lima, Perú, seleccionó a dos madres – cuyos hijos mayores estaban considerados como ofensivos de cara a las mujeres – para participar en un experimento social viral destinado a enseñar a sus hijos una lección sobre el acoso sexual.
Se dio un cambio drástico de imagen a las madres antes de salir a las calles para experimentar de primera mano el mal comportamiento de sus hijos.
Las cámaras ocultas, que se configuraron en dichas calles capturaron como los hombres las acosaban al igual que lo hacían normalmente con otras mujeres – sólo que ellos no tienen idea de que se los están haciendo a las mujeres que les dieron la vida, y eso es lo que fue captado por la cámara. Un tipo incluso fue tan lejos como para llamar a su madre «cerdita«. Y otro dijo: «¡bragas sabrosas!»
Las madres, por supuesto, se quedan «petrificadas» en la calle, se dan la vuelta y se quitan sus pelucas. Una vez que los hombres se dan cuenta de sus impactantes identidades, tratan de dar marcha atrás en sus comentarios inadecuados. Pero ya es demasiado tarde. Que comience la humillación…
Con suerte, esto debería ser suficiente para asustarles y que dejen de hostigar a las mujeres nunca más.