Al igual que muchos animales, cuando nace un gatito este se basa en su madre para su supervivencia. Necesitan una mamá gata para la protección, la alimentación, y la mayoría de necesidades y orientaciones. En última instancia la mamá enseña a sus gatitos todas las habilidades necesarias para que tenga éxito en su futuro.
En esta historia, vamos a mostrar un ejemplo de una enseñanza maternal. Es tan bonita que podrás sentir su infinita ternura en toda su plenitud.
Cuando esta mamá gata comienza a limpiarse a sí misma, su gatito, Neo, comienza a notar el comportamiento y, de inmediato empieza a copiar sus movimientos, aunque en algún momento parece que llega a tener problemas para bajar sus pequeñas patitas. Y es que sus patas eran simplemente demasiado pequeñas, y quizás todavía algo torpes, y no podía conseguir que alcanzasen su cabeza. Por otra parte, ¡tampoco sabía cómo utilizar su lengua!
Al final, mamá ve lo que está pasando y simplemente hace la limpieza por él. Es un momento que simplemente hay que verlo para apreciarlo. Compruébalo tú mismo a continuación.