A algunas personas les gusta leer libros en los cafés, o en el metro mientras van al trabajo. Otros, buscan para leer el lugar más tranquilo que pueden encontrar, algún lugar que les permita sumergirse completamente en las palabras sin que la magia se diluya por el ruido.
Si eres una de esas personas entonces te va a encantar esta retirada y aislada biblioteca situada en un bosque del estado de Nueva York. Está diseñada por la firma estadounidense Studio Padron y se llama Hemmelig Rom (que en noruego significa «cuarto secreto»). La biblioteca es negra exteriormente, tiene 200 metros cuadrados y está hecha de roble, y en su interior hay una cama, un sillón, una mesa de trabajo, e incluso una estufa de leña para mantenerla acogedora mientras te acurrucas con una novela sacada de las estanterías llenas de libros que te rodean.