Cuando estaba de pie en la iglesia, tratando de escuchar la homilía del padre Jack, un agudo dolor atravesó su estómago y sintió que estaba a punto de enfermar.
«Oh, no«, pensó Kayla. «¡Creo que tengo la gripe!»
Sintió náuseas, fatiga y apenas podía comer – estaba convencida de que tenía algunos síntomas que se irían la mañana siguiente, pero no podía estar más equivocada.
Después de caer enferma, fue al servicio de urgencias del hospital al día siguiente y su médico le dio unas noticias bastante alarmantes.
That moment when you go to urgent care and they casually inform you of your E.coli infection…🙄
— KB (@Kayla__Brandon) noviembre 16, 2015
«Ese momento cuando vas a urgencias y casualmente te informan de una infección de E. coli…«
¡¿E. coli?! Eso tenía que ser un error. Cuando el médico le preguntó por lo que había comido en los últimos días, se devanó su cerebro y citó los alimentos habituales que comía diariamente:
«Uvas, pollo, ensalada… como bastante saludable«, explicó Kayla al médico.
Después las radiografías confirmaron que su colon estaba severamente inflamado, el médico las miró fijamente y le dijo que era de hecho un blanco perfecto para una infección por E. coli.
Continuó explicando que, de todas las cosas citadas, las uvas eran muy probablemente las culpables de su enfermedad, porque las comía a manos llenas todos los días.
Al parecer, incluso aunque se laven las frutas y verduras antes de comerlas, no garantiza que sean seguras para comerlas.
De acuerdo con el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, aproximadamente una de cada seis personas, unos 48 millones solo en Estados Unidos, se enferman cada año por comer alimentos contaminados.
Los expertos dicen que se producen entre 200.000 y 800.000 casos diarios de intoxicación alimentaria en Estados Unidos, y que al menos un tercio de ellas a partir de productos.
La FDA sugiere lavar a fondo los productos tanto orgánicos como cultivados convencionalmente, con agua corriente antes de consumirlos o cocinarlos.
Si bien no es recomendable usar productos de lavado comerciales, si usted está buscando una manera natural para limpiar realmente sus frutas y verduras, trate de usar vinagre y zumo de limón.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, utilizando una combinación de vinagre de sidra de manzana, zumo de limón y agua para lavar los producto puede «reducir significativamente» el riesgo de Salmonella.
When you're on the mend, hydration is key. #squadgoals pic.twitter.com/QUxYdFoTD3
— KB (@Kayla__Brandon) noviembre 20, 2015
Después de mucha agua, descanso, evitando frutas, carne y verduras durante una semana, Kayla se recuperó.