Joaquín «El Chapo» Guzmán, capo de la droga de México, vivió «a la carrera», manteniéndose siempre por delante de las autoridades.
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La mañana del sábado 22 de febrero de 2015, los marines habían localizado a Joaquín Guzmán en un complejo residencial, y rodeado la zona. Antes de la salida del sol, a las 6:40 am, los marines abrieron la puerta de la planta cuarta del residencial, atrapando a Guzmán y sin disparar un tiro. Los marines mexicanos permitieron al fotógrafo Daniel Becerril darse un paseo por el laberinto de Guzmán.
Un marine mexicano levanta una bañera que conduce a un túnel que llega hasta en el sistema de drenaje de la ciudad desde una de las casas de Joaquín «Chapo» Guzmán en Culiacán.
Guzmán huyó a través de una puerta secreta debajo de una bañera hasta su red de túneles.»
Una escalera de acero conduce a la parte inferior desde una bañera extraíble en una de las casas de Joaquín «Chapo» Guzmán, el interior de un túnel lleva hasta el sistema de drenaje de la ciudad de Culiacán.
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Por lo que de manera segura y a través del laberinto de túneles, Guzmán huía al sur de Mazatlán.
Una puerta de acero abierta conduce a un túnel debajo de una de las casas de Joaquín «Chapo» Guzmán en el sistema de drenaje de la ciudad de Culiacán.
Con los marines como guías, el fotógrafo de Reuters Daniel Becerril nos muestra que los túneles de escape eran similares.
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Infantes de marina mexicanos y agentes de la DEA de Estados Unidos habían establecido puntos de vigilancia durante la búsqueda, así es como fue capturado Guzmán
Al final del túnel, Joaquín Guzmán podría escapar. Desafortunadamente para Guzmán, los infantes de marina mexicanos y los agentes de la DEA de Estados Unidos habían establecido una base de operaciones en la ciudad.
