Este método de las mitades del limón es sólo uno de los seis trucos de limpieza de cocina de Food52 que recientemente han publicado, y ya es uno de nuestros favoritos. Y es que nunca se nos habría ocurrido, pero tiene todo el sentido una vez que lo analizamos. A continuación les dejamos con seis excelentes trucos de limpieza para la cocina.
1. Combina el poder de los limones y el horno para matar a las moscas de la fruta.
Las moscas de la fruta son persistentes y un problema difícil de abordar, pero con este inteligente consejo se librará de ellas rápidamente. Sólo hay que poner dos mitades de limón en el horno y dejar la puerta abierta durante toda la noche. Por la mañana, se cierra la puerta y se pone el horno durante unos minutos. Apagarlo, dejar que se enfríe el horno, tirar los limones y limpiar la parte inferior de su horno. ¡No más moscas!
2. Use vinagre – y sólo vinagre – para eliminar los depósitos de agua dura.
Somos unos grandes fans de este consejo desde que lo hemos conocido. Si usted tiene un lavabo manchado por el agua dura, todo lo que necesita es vinagre para disolver los depósitos de calcio y hacer que se puedan quitar de una forma completamente fácil.
3. Elimine la «porquería» de sus puertas sin productos químicos agresivos.
Otra de nuestras ideas favoritas implica otro elemento básico de limpieza «hazlo tú mismo» casi tan popular como el vinagre: el bicarbonato sódico. Al hacer una solución formada por una parte de aceite vegetal y dos partes de bicarbonato sódico, va a crear el limpiador perfecto para puertas de cocina. Sólo necesitará frotar la madera con una esponja, un cepillo de dientes, o incluso con sus manos.
4. Mantenga su fregadero blanco y brillante con limón sobrante.
Un fregadero blanco puede hacer que su cocina se vea clásica y fresca, pero también puede mostrar zonas de pequeños desastres. Con el tiempo, las manchas pueden aumentar, no importa cuán diligentemente limpiemos. ¿La solución? Una vez más, es el bicarbonato sódico. Esta vez, en combinación con una rodaja de limón mata los gérmenes y conseguirá algo de brillo. Tan sólo espolvoree un poco de bicarbonato de sodio en el fregadero y use la cáscara o piel de limón como si fuera un estropajo (como aparece en la foto).
5. Un truco del baño a la cocina.
La lechada descolorida y sucia no sólo sucede en la ducha. Los azulejos o baldosas de la cocina también tienen ese problema, como cualquier cocinero casero sabe. Hay un truco muy sencillo para este problema: el vinagre y, sí, una vez más, el bicarbonato de sodio. Haga una pasta de bicarbonato sódico y agua, aplíquela sobre la lechada, y deje que repose. Después rociar con vinagre, y tras la efervescencia, frotar con un cepillo de dientes.
6. Limpie el aire con una solución de AROMA sensacional.
A veces no importa lo limpias que nuestras cocinas estén, simplemente no huelen a limpio. Ahí es cuando volvemos de nuevo con un viejo amigo: el vinagre. Cocer a fuego lento un poco en la cocina ayuda a limpiar el aire y volver a tener un olor más neutral.